El hombre de verdad es el que sacia todas las necesidades femeninas

En los artículos precedentes vimos que las necesidades femeninas cambian continuamente y hablamos de que existen hombres diferentes que estimulan necesidades femeninas diferentes.

De hecho, hay hombres que generan la necesidad femenina de tener una relación (los “chicos buenos”) y hombres que, al contrario, estimulan el nacimiento de necesidades relacionadas solamente con la esfera sexual.

En realidad, existe una tercera categoría de hombres que logran saciar todas las necesidades femeninas, ya sean las que están vinculadas con la sexualidad y el sentirse mujer como aquellas relacionadas con la seguridad en una relación.

Hablo del hombre de verdad: el que satisface las necesidades femeninas en 360 grados.

De hecho, por una parte, una mujer tiende a buscar un hombre que le de seguridad para crear una relación estable.

Desafortunadamente, una buena parte de los “chicos buenos” no tienen mucha energía masculina o, por lo menos, logran transmitir seguridad pero les falta el dominio positivo y la masculinidad.

No obstante, una mujer necesita estas cualidades y por eso muchas (muchas más de las que piensas) traicionan a su pareja con hombres más alfa que él, hombres con los cuales quizás no mantendrían una relación pero que saben tocar esa cuerda de la mujer que necesita un hombre viril.

Por otra parte, estos hombres (alfa viriles) a menudo son poco confiables y no logran mantener relaciones duraderas con las mujeres que quisieran.

Por tanto, muchas mujeres viven una contradicción dentro de sí mismas, por una parte quieren seguridad y protección pero por otra, quieren la adrenalina que solo le puede dar un hombre con una fuerte energía masculina.

Y he aquí que el hombre de verdad hace su aparición, el que logra dar seguridad y ser viril al mismo tiempo.

¿Y cómo lo logra? De dos modos fundamentales:

1. Logra dar seguridad como lo hace el “chico bueno” pero la fuente de esta seguridad es más genuina

Una de las diferencias fundamentales en la dinámica de pareja entre el verdadero hombre y el chico bueno es la modalidad implícita de la cual se genera la fidelidad.

Sí, porque la fidelidad en una pareja puede surgir de dos fuentes escondidas y diferentes.

La primera fuente es la del chico bueno que no traiciona porque, inconscientemente, tiene miedo a ser descubierto y, por lo tanto, teme quedarse solo, sin nadie.

La segunda fuente es la abundancia del hombre de verdad, en la base de su fidelidad hay un mensaje diferente: “Podría estar con otras pero te he elegido a ti”.

Esta es la única fuente real de fidelidad sana y, si una mujer te interesa realmente, debes subcomunicar este mensaje desde el primer momento en que nace tu interés hacia ella.

¿Cómo?

Creando una imagen de abundancia sexual (lee el artículo al respecto) y, al mismo tiempo, dejando entrever tus intenciones y sentimientos.

Una de las sensaciones más bellas que puede experimentar una mujer es la de haber sido elegida.

2. Logra ser viril sin ser un gilipollas, así mantiene alta la atracción

El hombre de verdad logra ser viril y dominante sin ser un gilipollas o un dictador.

Muchos piensan que es de “pijos” tratar mal a las chicas pero en realidad es un signo de debilidad interna.

Al contrario, el hombre de verdad logra mantener alta la polaridad masculina / femenina de la cual se genera la atracción sin comportarse como un gilipollas.

Como he dicho anteriormente, a menudo sucede que una mujer traicione al “chico bueno” con el que tiene una relación para irse a la cama con un hombre “de una noche”.

La característica fundamental de este hombre es que logra generar una fuerte atracción gracias a la polaridad masculina / femenina y crea una fuerte tensión sexual debido a la dominación y virilidad.

El hombre de verdad también logra mantener esta polaridad y, por tanto, no hace que la atracción disminuya. De esta forma, un hombre de verdad no tiene miedo a ser traicionado, ¿cómo puede una mujer traicionar si ya recibe todo lo que necesita?

Por otra parte, como ya he dicho, el hombre de verdad logra dar seguridad y, como mantiene alta la atracción, no se convierte en el ligue de “una noche”. Puede tener sexo ocasional fácilmente pero también puede decidir si quiere mantener una relación.

En la práctica, ¿cómo lo logra?

En la práctica, incorpora las características de la energía masculina que generan una fuerte atracción y tensión sexual. Específicamente: Fuerza, Imperturbabilidad, Iniciativa y Dominación Positiva.

Además, nunca olvida.. y digo nunca… que una mujer debe ser seducida cada día.

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Resumiendo: el hombre de verdad logra satisfacer todas las necesidades de una mujer, no importa si ella busca solo sexo o si prefiere mantener una relación.

Pero, ¿este tipo de hombre se comporta de la misma forma en ambos casos?

No, es capaz de adaptarse a las diferentes situaciones.

¿Cómo?

La respuesta está en el próximo artículo.

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