¿Problemas con las mujeres? Cómo fragmentar el problema para tener éxito
Hoy te hablaré de un método, un método extremadamente lineal, para resolver tus problemas con las mujeres.
Este método no solo sirve para resolver los problemas con las mujeres sino que también es muy útil en todos los campos de la vida. Pero hoy nos referiremos solo a los problemas relacionados con las féminas.
Pongamos inmediatamente un ejemplo práctico.
Digamos que quieres aprender a atraer a una mujer pero las chicas particularmente guapas te crean ansiedad por lo que ni siquiera logras hacer una broma sagaz, ni siquiera cuando te presentan a la mujer.
Entonces… para atraer a una mujer se deben hacer muchas cosas, no es solo una tarea que demanda una simple acción sino más bien un conjunto de acciones.
Por tanto, en tu mente visualizas ese montón de cosas que tienes que hacer, son demasiadas y por eso te bloqueas, incluso antes de comenzar. Te dices inconscientemente “Nunca lo lograré, no tendré éxito en esto o aquello”.
Bien, para enfrentar la cuestión de manera ganadora puedes fragmentar el problema, es decir, dividir el problema en pequeños pedazos.
Una vez que hayas dividido el problema surgen una serie de micro objetivos que, si bien al unirlos parecen algo muy complicado, al dividirlos resultan factibles.
¿Por qué esta estrategia funciona?
Porque el criterio que define el éxito ha cambiado, por tanto, ¡tener éxito es más sencillo!
Antes, para tener éxito, tenías que atraer a una mujer, lo cual demandaba una serie de acciones muy complicadas.
¿Y ahora?
Ahora dependerá de cómo has dividido el problema en micro objetivos.
Por ejemplo, podrías plantearte que las próximas tres veces que encuentres a una mujer muy guapa, solo debes preguntarle qué hora es.
¿Ya lo has hecho? A las 3 mujeres sucesivas solo deberás preguntarle la hora y hacerles una broma.
¿Hecho? A las 3 sucesivas deberás pedirles la hora, hacerles una broma y sostener una conversación al menos durante 2 minutos.
Se trata solo de ejemplos, cada problema se deberá descomponer en sus correspondientes micro objetivos de forma que poco a poco logres resolverlo todo.
Habrán hombres que no necesitarán esta estrategia pero otros sí.
Si formas parte del segundo grupo, no te avergüences al dar estos pequeños pasos, cada persona es diferente y parte de una situación diversa.
Yo usé este método y me sentía muy feliz con cada pequeño paso que daba, si hubiese querido hacerlo todo de una vez probablemente habría fracasado miserablemente y no estaría aquí escribiendo sobre seducción, estaría tumbado en la cama pensando en cuán desgraciado e infeliz era.
Por tanto, no te dejes cegar por el orgullo, sé lo suficientemente humilde como para aceptar que en ciertos ámbitos necesitas moverte dando pequeños pasos.