Dominio y virilidad para excitar a una mujer
Anoche escuché una conversación muy interesante, y me recordó que muchas veces los hombres se equivocan hablando de la relación entre sexo y mujeres.
Dos chicos que conozco, un hombre y una mujer, estaban conversando.
Ella había tomado un poco, per no estaba borracha y estaba tratando de provocarlo. Él estaba siempre más excitado y ella dijo algo como “¡Quiero un hombre para hacer el amor esta noche!”.
Él se acerca a ella y le dice “¡Aquí estoy!”.
Ella lo mira bien y responde “¿Tú?! Tú solo me mimarías.”.
Él la mira extrañado, sin entender bien lo que ella estaba diciendo.
En cambio yo sabía lo que quería decir y para divertirme un poco animo la conversación.
Reborn: “Ya sé lo que quieres. Tú quiere alguien que te coja bien.”
Ella: “Sì sì, alguien que el momento menos pensado…”
Reborn: “¡Te coja y te folle bien rico!”
Ella: “Sì.. en cambio él me mimaría, que está bien, ¡pero después del sexo!”
Él estaba extrañado, quería explicarle que era lo quería decir ella.
El hecho es que él no comunicaba suficiente dominio y virilidad. Mostraba unas características que son útiles en algunos momentos, como por ejemplo ser amable.
Ella, que debido al alcohol perdió inhibición, hablaba libremente pensando en lo que habría querido hacer en la cama.
Antes de todo quiere acostarse con un hombre con virilidad y dominio.
Por supuesto que después querrá ser mimada… pero cuando una mujer toma se olvida de todas las chorradas que la sociedad le ha impuesto, y su lado animal empieza a hablar por ella.
Aquella parte animal que hace mucho tiempo, en la época de los primitivos, daba mucha más importancia a características como fuerza, virilidad, dominio ecc. Ecc.
Entonces, si quieres relamente provocar el lado del los instintos de una mujer, muestrale estas características.
Ella puede no admitirlo, pero la enloquecerás.
¿Sabes por qué?
Lo harás porque los hombres que son así son muy pocos.
En el profundo una mujer busca siempre a un hombre con una carga masculina muy fuerte, y en cambio encuentra a hombres que no la tienen.
Ten cuidado que lo que quiero decir es que en la cama pueden haber muchos hombres fuertes, pero que afuera con los demás ellos mismos no son capaces de mostrar las características de antes: las sociedad le transformó el cerebro.
Según la ley del mercado lo que es escaso tiene más valor. Un diamante de hecho no es caro, pero por el hecho de ser escaso adquiere valor.
Es el mismo mecanismo presente en las relaciones humanas, así que sé diferente respecto a los otros, y adquirirás valor.